Actualizado el: 7 julio, 2023 por Kyamos The Stubborn
Capítulo 1 – Eiji: Lobo de la Novena Avenida.
Capítulo 1-17
Más flexible, más fuerte y más ágil.
Esa era la forma a la que había cambiado, el resultado de buscar poder simplemente para cazar y comer a su presa.
El temible lobo que se decía habitaba en la Novena Avenida de Wall Slum.
—“¿Loogarmon?… ¡No puede ser, este digimon es…!”
Siseó Satsuki desde el suelo.
El lobo azul, mucho más grande en tamaño que antes y cubierto con llamas mágicas, aterrizó en el techo de tejas del templo del Castillo de los Nueve Lobos
Una enorme cantidad de energía era observable.
La energía que rebosaba del interior del digimon adulto brotó de su boca en forma de llamas.
—“Así es, soy Loogamon, pero además… ¡Soy Loogarmon!”
El digimon de Eiji evocaba los recuerdos de la llama mágica que ardía en interior hace unos momentos.
—“¿Loogamon… quiero decir, Loogarmon?.” Eiji habló desde su interior. —“¡¿Recuperaste tus recuerdos?!”
—“¡El Lobo Demoniaco del Castillo de los Nueve Lobos…! He oído hablar de él. ¡Se supone que describe al jefe de la Novena Avenida de Wall Slum!”
Satsuki apretó los dientes.
Magia y fuego convergían en la boca de Loogarmon.
Un destello.
—“¡Howling Burner!”
Llamas incandescentes condensadas salieron disparadas.
Ninguna cantidad de mucosa podía detenerlo. El Numemon recibió un impacto directo y se retorció y se sacudió.
—“¡Ngh!” Gritó Satsuki. —“¡N-Numemon! ¡Mi precioso Numemon…!”
Si un digimon compañero sufre un daño tan grave que llega a su digicore, ese daño afecta también los datos mentales del humano haciendo MindLink. El daño al digimon causará dolor y señales de estrés a su conciencia.
Numemon seguía quemándose dentro de las llamas inextinguibles.
La potencia de este fuego era mucho más grande que la de antes. Si las llamas de la etapa niño eran una hoguera, estas eran un quemador colosal que podía incinerar acero..
—“¡Numemon está gravemente dañado!”
—“¡Nos han ordenado retirarnos! ¡Recuperen a los heridos!”
Los miembros de la DigiPolicía actuaron inmediatamente viendo a su comandante caído.
La presión del viento de los rotores del Cargodramon extinguieron las llamas consumiendo a Numemon, y tras recuperar a los heridos a bordo de la aeronave, la DigiPolicía, junto con el escuadrón de Commandramon, se retiró.
A bordo del Cargodramon.
—“¡Cómo se atreven a hacerle esto a mi Numemon!”
Satsuki apretó los dientes mientras atendía a su Numemon gravemente quemado.
—“¡Subjefa de escuadrón! Se ha excedido el umbral de advertencia. ¡Debe apresurarse y terminar el MindLink!”
—“No.”
La hololizada Satsuki hizo caso omiso a la preocupación de su subordinado en la sala de chat.
—“¡Pero…!”
—“Ellos le hicieron esto a mi Numemon. No te lo perdonaré, maldito cracker…. la próxima vez lo pagaras, te lo prometo…”
El Cargodramon devolvió sus motores de rotor basculante a una posición horizontal y ascendió a través del Océano Net a toda velocidad.
Mirando hacia la novena avenida de Wall Slum, Satsuki soltó una carcajada.
—“¡Cracker Eiji, definitivamente te voy a arrestar!”
Tras deshacerse de Cargodramon, que se había retirado y desaparecido más allá del mar de redes, Eiji se hololizó de nuevo y se puso al lado de su Digimon.
Loogarmon.
Su aspecto general era el de un lobo, y el color de su pelaje daba la impresión de que se trataba de un Loogamon de mayor tamaño.
Sin embargo, el pelaje de su cuerpo era más largo, lo que le daba un aspecto más demoníaco.
La mayor diferencia era el tamaño: Loogarmon tendría el tamaño de un rinoceronte si habláramos de animales de verdad. La interfaz de su frente seguía allí.
De pie sobre las tejas del techo del templo, Loogarmon miró hacia la estrecha vista del cielo sobre el Castillo de los Nueve Lobos.
—“Después de evolucionar y… volver a la etapa adulta, por fin he recordado algo. Esta Novena Avenida de Wall Slum era mi dominio.”
—“El Lobo Demoniaco del Castillo de los Nueve Lobos… ¿Verdad? Eso quiere decir que eras el jefe aquí. ¡Eso es genial!”
Eiji lo alabó cortésmente.
—“Me pregunto… ¿Tal vez al final perdí mi posición como jefe?”
Tal vez fue derrotado en batalla y perdió su posición como jefe. O tal vez se fue por su cuenta. No lo podía recordar.
—“Tienes un extraño tipo de amnesia, solamente recordando cada vez que evolucionas. Aunque mi conocimiento de la amnesia se limita a mangas y películas.”
—“Hmmm… Bueno, cómo sea. Lo recuperaré todo… mi poder, mi memoria y todas mis evoluciones.”
Loogarmon tenía el presentimiento de que podía seguir evolucionando.
El ardiente fuego mágico al fin se había extinguido, y por fin, el silencio había vuelto a la Novena Avenida.
Un zumbido
Se oyó un ruido y algo apareció por el fondo del callejón.
Eran digimon.
No eran sólo uno o dos. Una multitud de habitantes de Wall Slum en cantidades que te hacían preguntarte cómo se habían escondido empezaron a salir a la plaza del Castillo de los Nueve Lobos.
—“¿Qué…? ¿Qué sucede?”
Eiji estaba atónito.
En Wall Slum era matar o ser matado. ¿Acaso todos esos Digimon eran los próximos en atacarlos?
Sin embargo, Loogarmon… saludó tranquilamente a los Digimon que se habían reunido en la plaza.
—“¡Loogarmon!”
Se oyó una voz.
La voz pronto se convirtió en la voz de docenas o cientos de digimon, resonando por todo el Castillo de los Nueve Lobos.
—“¡Loogarmon! ¡Loogarmon! ¡Loogarmon!”
Los digimon reunidos en el Castillo de los Nueve Lobos celebraron el regreso de su jefe.
El digimon vestido de harapos observaba en secreto desde la azotea de un edificio de la zona roja.
—“El Lobo Demoniaco del Castillo de los Nueve Lobos ha regresado.”
Dijo el digimon harapiento.
—“Es un espectáculo inspirador, ¿No?.”
Murmuró alguien en el chat de voz. Era el entrevistador de SoC.
—“Que malo eres. Alertar a la policía solo para ponerlos a prueba.”
—“Esa subjefa de escuadrón de la DigiPolicía ni siquiera fue rival para él, ¿Verdad? No esperaba que enviaran su propio Mindlinker, pero los resultados fueron lo que esperaba. Loogarmon… ese ‘Digimon Prototipo’…”
—“¿Qué hay del cracker?”
—“Me reservo mi opinión.”
—“Hmmm… parece que han completado su trabajo de mapeo.”
Ya habían recibido los datos de la herramienta de mapeo que les dieron desde hacía horas.
—“Por supuesto que han pasado el examen de ingreso a SoC. Quiero tantos crackers con la habilidad de hacer MindLink como me sea posible conseguir.”
—“¿Crees que puedes guiarlo? A ese chico cracker, quiero decir… Eiji Nagasumi. Tiene que llevar a su compañero digimon… a lo más ‘profundo’.”
—“Tendrá que hacerlo. Después de todo, es el lugar que nos prometieron. ¿Verdad, Dorumon?”
Whoosh
El trapo harapiento cayó, desprendido por un fuerte viento.
——Dorumon, etapa niño, tipo bestia, atributo datos.
Tenía una cola tupida.
El Digimon que salió de debajo del trapo era de color claro y a primera vista parecía una ardilla u otro animal pequeño.
Sin embargo, se decía que en su digicore tiene datos del “Dragón”, la bestia mitológica conocida por cuentos transmitidos de generación en generación. La prueba de ello eran las pequeñas alas de dragón que brotaban en su espalda——
En la frente de Dorumon, brillaba una interfaz, igual a la de Loogamon.
Historia por: © BANDAI
Diseño de personajes/Ilustraciones: malo
Traducción al español: Kyamos the Stubborn.
Edicion y correccion: Zeromaru X