[nikomon]

con un nombre sacado a la rápida, voy a empezar a publicar una serie de fanfics one shots de digimon al estilo de los reportes del digimon pendulum Z en el que en cada capitulo se mostrarán las aventuras y descubrimientos de un investigador del mundo digital, que aclaro, es un humano.
Espero les guste mi propuesta.
Capitulo 1: El rey del metal empire
todo parece ir calmado en el metal empire, varios digimon están descansando luego de lo que pareció ser una jornada laboral ardua. Trato de ser cuidadoso y no molestar para no perder ningún tipo de detalle, parece todo tranquilo, la mecánica de trabajo parece ser de a turnos en grupo y el compañerismo se puede sentir en estos digimon, pero algo haría cambiar mi percepción.
No sé como, pero el ambiente con la sola presencia de este individuo pasó a tener un aire tenso, se trataba nada más ni menos que de Metalgreymon, quién al parecer venía para coronarse rey del metal empire, a lo que Rapidmon, un digimon conocido por su lealtad al rey y a sus compañeros, intervino en los planes del dragón mecanizado.
- Rapidmon: No dejaré que le faltes el respeto a mi señor, no sé quién te has creído.
- Metalgreymon: No me hagas reír enano, da pena como eres tan devoto a alguien tan repugnante, si te hace sentir bien, es lo único en lo que te pareces a tu jefecito, por que fuera de eso eres una basura.
- Rapidmon: prepárate para tragar tus palabras, maldito.
A lo que Rapidmon expresó esas palabras, un enfrentamiento se llevó a cabo, algunos digimon como Junkmon o Jazamon escaparon, mientras otros como Metalmamemon y Megadramon ayudaban con el escape.
La situación no daba para bien, el impacto de los golpes de ambos causaban temblores y destrozos en las instalaciones, el ruido era insoportable para cualquiera, motivo por el que el rey apareció.
Todos los digimon al presenciarlo, corrieron como si sus vidas dependieran de ello y Rapidmon junto a Metalgreymon siguieron con su pelea mientras el rey se acercaba, no era nada más ni menos que Mugendramon.
- Mugendramon: Insolentes, interrumpen mi descanso.
- Rapidmon: perdóneme señor, si no fuese por este rebelde de Metalgreymon, nada de esto estaría pasando.
- Metalgreymon: Tú lárgate, Mugendramon, ni siquiera eres el rey, esclavo impostor.
- Mugendramon: (risas) con que te gusta hablar de más, está bien, por mi no hay problema, no hay nadie, pero eso si ¡Rapidmon tú también morirás!

- Rapidmon: ¡pero señor! ¡yo he sido leal a usted!
Al terminar de pronunciar esas palabras, los dos digimon que alteraron la paz de Mugendramon pasaron a ser unos huevos, los cuales el digimon quimera llevó consigo.
Al volver a su posada, una especie de alarma empezó a sonar y todos los digimon volvieron a sus puestos de trabajo como si nada.
Al parecer, hay algo extraño en la jerarquía del metal empire, habrá que investigar más al respecto.
Debo confesar que tuve suerte que Mugendramon no se percatara de mi presencia, yo no soy un digimon, así que yo no habría corrido con la suerte de convertirme en huevo

[nikomon]

Capitulo 2
Alex y Manticoremon

Un día me encontraba en un torneo de tamers, nada del otro mundo, o eso creía...
Un tamer llamado Alex llevaba consigo una especie descubierta hace poco, todos estaban sorprendidos, pues, se creía que solo los virus busters eran quiénes controlaban a este raro digimon, pero esta creencia se desvaneció con su sola aparición en el ring. Hablo de Manticoremon, el cazador de virus, pero este era distinto, pareciese estar entrenado hasta para devorar vacunas, así fue como a Justimon, con quien se enfrentaba, se le fue arrebatada su blitz arm de una manera cruel, dolorosa y lenta. Si no fuese por la intervención de Beowolfmon, quien servía como mediador de las batallas, la vida de Justimon habría acabado ahí. Su tamer correría entre lágrimas a atenderlo, mientras que Manticoremon se reía como un niño, Alex no se veía muy contento, pero le tocaba su siguiente batalla.
La tamer Carla llegó junto a su digimon nivel ultimate, Darkdramon. Ambos decididos a ganar se lanzaron contra el cazador de virus, quién cambió su actitud a una aún más agresiva, ya no era una pelea, era una merienda para Manticoremon, parece que por más entrenamiento que tuviese, su apetito siempre iba a ser dedicado para los virus.
Darkdramon no pudo dar ningún golpe, su tamer Carla lloraba en desesperación y pedía por ayuda, Beowolfmon trató de hacer algo pero fue derribado brutalmente. Darkdramon no aguantó más y quedó inconsciente, quedando a la merced de la bestia hambrienta.
Alex igualmente empezó a llorar, algo raro le pasaba, en lo que procedió a pedir que eliminaran a su digimon, a lo que Beowolfmon viendo como se estaba desarrollando la situación accedió y mientras Manticoremon estaba a punto de terminar su bocadillo, el guerrero de la luz lo atacó por la espalda, acabando con su vida, pero el pobre Darkdramon no pudo ser salvado y sus datos pasaron a ser un huevo.
Días después, leyendo el periódico, me enteré que estaba en lo cierto, Manticoremon fue entrenado para devorar vacunas y datos por igual, el tamer Alex entrenó a su digimon para que evolucionase a esta forma y lo preparó para tener un paladar con gusto variado para que no hubiese quién los derrotara.
En la entrevista que se le hizo a Alex, confesó que hizo todo esto para obtener el premio que era una gran cantidad de dinero y así poder sostener a su familia, pero aún con el dinero, la culpa lo consumía, arrebató la vida de un digimon y a la vez, la vida de su digimon, su compañero, su amigo.

[nikomon]

El templo de datos

eran las 12 del día, quedé de verme con mi amigo Gaomon, me quería mostrar un templo que es muy especial para él, pues lo relaja demasiado. Lo veo llegando y me grita
Gaomon: ¡Cristian!
(si, me llamo Cristian, detalle que he omitido en mis anteriores informes)
Cristian: ¡Gaomon! ¡Que gusto verte querido amigo!
Gaomon: vamos, estoy ansioso por ir y mostrarte lo maravilloso que es el templo.
Cristian: Pues, vamos...
Y así llegamos al templo de datos, lugar donde los digimon pueden entrar a rezar y hacer sus oraciones, otros deciden convertirse en monjes para alcanzar el gozo espiritual y practicar el amor a Dios y al prójimo, aunque no sé quién es el verdadero dios del mundo digital, muchos dicen que es la computadora host, Yggdrasill, pero yo creo que hay algo más, de todas maneras no soy muy bueno en estos temas espirituales o religiosos y menos en un mundo que no es el mío.
Gaomon: Te lo presento, Cristian, él es Kotemon, uno de los monjes del lugar.
Kotemon: Un gusto, Cristian, Gaomon suele hablar muy bien de ti.
Cristian: (risas) ¿verdad?
Gaomon: ¡No digas esas cosas a la ligera Kotemon!
Pasando por los pasillos veo a varios digimon que son monjes, entre los que veo a Falcomon, Angemon, Herissmon, Gabumon… Sin lugar a dudas son muchos los digimon que deciden dejar la vida mundana en el mundo digital para pasar a un estilo de vida más espiritual.
?: Wow ¡un humano!
Escuché decir eso y se trataba de un Wanyamon, acompañado de varios de su especie, junto a una gran cantidad de Puwamon, Tanemon, Poromon, Pusurimon y demás.
Tanemon: ¿quieres jugar?

Poromon: ¡Sí, juega con nosotros por favor!
Pusurimon: Tengo hambre
un poco incomodado pero a la vez sintiéndome conmovido por la ternura de estos jóvenes digimon, decido acceder, pero antes de siquiera pronunciar una sola palabra, llega alguien a poner en orden a los bebés digimon.
?: ¡Déjenlo tranquilo, por favor! Siempre hacen esto cuando llega alguien nuevo.
Se trataba de Sakuyamon, quién por conversaciones previas con mi amigo Gaomon, deduzco que es la dueña del templo de datos.
Cristian: No se preocupe, de todas maneras me gustaría jugar con estos adorables niños.
Sakuyamon: ¡Me agradas! ¿Cómo te llamas?
Procedo a decirle mi nombre y quedamos en un acuerdo en el que yo y Gaomon cuidaríamos de los bebés mientras se llevan a cabo unos rituales rutinarios.
Después de una agradable jornada de juegos, yo y Gaomon pasamos a dejar a los bebés a sus cuartos, pues era la hora de la siesta para ellos, pero algo me inquieta y como todo investigador, procedo a preguntarle a mi amigo.
Cristian: Oye, Gaomon.

Gaomon: Sí, dime.
Cristian: ¿por qué ellos viven acá?
Gaomon: Por que no tienen a donde ir, son digimon que fueron abandonados de alguna u otra forma por sus familias
o tribus.
Cristian: Ya veo...
Pasamos a caminar por los pasillos, pero algo me pasaba, me daba pena el pensar que el abandono sea algo que también le ocurra a los digimon, Gaomon como buen amigo que es, logró percibir mi inquietud y prefirió no decir nada, esto es algo que supe tiempo después en una conversación.
Seguimos caminando hasta entrar en una sala de rezo y oración y vemos a un Digimon, se trataba de Dinohumon, quién estaba rezando junto a Sakuyamon, me quedo a verlos un rato, hasta que Dinohumon, dándose cuenta de mi presencia me dice lo siguiente.
Dinohumon: Sé que estás ahí, humano. Puedo sentir tu preocupación por esos pequeños, pero no te preocupes, yo, Sakuyamon y los monjes, les hemos dado un hogar y nunca están ausentes en nuestras oraciones. Si gustas, tú y tu amigo pueden rezar con nosotros.
Gaomon: Ah, no, Cristian no es muy creyen…
Cristian: Está bien
Al decir esas palabras, Gaomon me miro con alegría y procedimos a rezar.
En ese momento aprendí que aunque pueda haber oscuridad en el mundo humano o en el digital, siempre habrá luz también, seres de luz.
Desde ese día siempre vamos al menos dos veces al mes con Gaomon al templo a rezar y a jugar con los pequeños, también me he hecho cercano a Dinohumon con quién tomamos café y conversamos de la vida a la vez que me enseña cosas de los digimon que son útiles para mis investigaciones.

[nikomon]

Capitulo especial: Calumon

Nota: Este capitulo no estaba planeado, pero ya que Calumon fue añadido al digimon reference book y su videojuego estuvo de aniversario recientemente, decidí dedicarle un capitulo en conmemoración a uno de los digimon más tiernos que hay en la franquicia, espero les guste.

Hoy, les voy a contar los sucesos de una investigación que realicé cuando aún era un estudiante de investigación digimon, si no me equivoco fue un martes, estaba en el aula junto a mis compañeros y de repente llega nuestro profesor, el lord superior como le gusta que le llamen...
?: Hola chicos, hoy no vamos a anotar na, prepárense pa una clase en acción.. Gya
Cristian: ¿entonces vamos a ir de paseo estudiantil profesor Agumon?
Agumon Hakase: ¡Lord superior para ustedes, insolentes! Gya
?: aquí va de nuevo...
Agumon Hakase: ¿Qué dijiste Terriermon? Gya
Terriermon Assistant: ¡Que lo respeten! ¡Su conocimiento se respeta, se alaba!
Agumon Hakase: Sí, sí, como digas, tráeme algo de comer... Gya
Terriermon Assisant: ¡A su orden!
Agumon Hakase: Bueno chicos, vamos a ir a investigar, no importa que encuentren datos ya registrados, con que encuentren algo que desconocían, están premiados.
En ese momento, mi amiga Paula dijo algo de lo que se arrepentiría.... Si es que el profesor se diera a respetar.
Paula: ¿con que nos vas a premiar? Ah, sí, con nada, por que eres tan tacaño, que no tienes para comprar un premio... oh ¡verdad! No es de tacaño, es de goloso.
Luego de eso, no pasó nada, estábamos más preocupados de lo que íbamos a investigar que de lo que el profe tenía que decir.
Ya fuera del aula, llegamos a un bosque donde había varios digimon, entre ellos Babydmon, una especie que tiene un código de programación de digimon antiguos, también estaba Patamon, un digimon mamífero y así habían más y más
El profesor Agumon iba a dar sus indicaciones, pero antes que pudiese decir algo, se escuchó un fuerte ruido a lo lejos, era Blitzgreymon, una especie de nivel ultimate. Eso fue razón suficiente para que todos mis compañeros se emocionaran y procedieran a ignorar al profesor e ir en búsqueda de Blitzgreymon para sacar información suya.
Agumon Hakase: Vaya, no me respetan, si no fuese por que los llevé a un hábitat pacífico estarían hechos tortilla por andar sin un camarada digimon que los acompañe gya…. mmm, tortillas gya.
¡Terriermon! Tráeme tortillas Gya
Terriermon Assisant: ¿pero de donde...
Agumon Hakase: ¡Dame torillas gya!
Mágicamente y sin explicación hasta ese momento, Terriermon, evolucionó en Galgomon, algo que nos dejó sorprendidos a mi y al profesor
Galgomon: ¿Qué querías?
Agumon Hakase: Nada... Gya
En ese mismo instante, Galgomon empezó a disparar al profesor Agumon, no entendía nada de lo que estaba pasando.
Agumon Hakase: ¡Cristian ayúdame porfavor, detenlo! Gya
Mientras Galgomon seguía con su "venganza" al profesor, me di cuenta que había un pequeño digimon blanco en un árbol viendo todo expectante, si bien tenía que ayudar a mi maestro, más importante era mi formación, así que fui a subirme al árbol.
Mientras me acercaba, el pequeño se asustaba, pero no intentaba escapar, hasta que me puse al frente de él y no pude evitar comunicarme con él
Cristian: ¿puedo hacerte algunas preguntas?
?: Bueno... Calu.
Después de un rato hablando arriba del árbol, empecé a llevarme bien con el pequeño, se llamaba Calumon, era muy tierno e inocente, la charla se estaba alargando mucho, pero el problema es que solo me hablaba de sus juegos favoritos, así que le pregunté.
Cristian: Oye ¿y cuales son tus ataques?
Calumon: Ata... ¿qué? Calu
Cristian: Tus ataques, con los que peleas
Calumon: Eso no me gusta, Calu. Siempre que se me acercan los digimon, se hacen gigantes, hablan de pelear y dejan de jugar conmigo Calu
Calumon empezó a llorar, fue algo incómodo, no entendía a que se refería, pero algo me decía que el necesitaba un amigo en el que poder confiar, así que le propuse algo..
Cristian: Mira, mi amigo acaba de evolucionar y está atacando a mi maestro, nada serio, solo están jugando, pero tengo miedo que al lagarto que tengo de profesor salga herido ¿me podrías ayudar? Después de eso podemos jugar.

Calumon: ¿enserio? No te volverás agresivo como el dragoncito naranja que se volvió un robot rojo. Calu
En ese momento me di cuenta que estaba hablando de Blitzgreymon, el digimon por el que mis compañeros se volvieron locos. Aún así, aunque tuviese delante de mí a un gran objeto de investigación, tenía que ayudar al profesor Agumon y cumplir mi promesa de jugar con el adorable Calumon.
Cristian: Te lo prometo.
Después de una sonrisa, procedimos a bajar del árbol pero Calumon se cayó y empezó a llorar, por lo que bajé inmediatamente a curar sus heridas, en lo que veo sorpresivamente a Terriermon escapando ahora de Agumon, suceso que me dejó impactado, pero más fue el impacto de Agumon al ver a Terriermon.
Agumon Hakase: ¡Es la Calumon! Gya ¡El digimon de la evolución! Gya
Calumon: ¿yo que? Calu
Agumon Hakase: Cristian, encontraste a Calumon el digimon por el que los traje de expedición, el responsable de las múltiples evoluciones en este lugar, este digimon es capaz de hacer evolucionar a los demás, gya
Cristian: Lo sabías desde un inicio... Dije desconcertado
Agumon Hakase: ¿y que importa? Vamos al aula vendremos todos con Calumon, deja prendo el telestransportador, gya.
Cristian: ¿teletransportador?
En un abrir y cerrar de ojos, estábamos todos en el aula, al parecer el profesor tenía un nuevo invento para teletransportarnos al aula, algo raro pero normal si hablamos del profesor Agumon.
Estaban todos mis compañeros cansados, no habían logrado alcanzar a Blitzgreymon, pero quedaron fascinados por la ternura de mi amigo Calumon y empezaron a acariciarlo tiernamente.
Después de este día, Calumon empezó a ser un nuevo asistente de Agumon, no tan interesado en aprender como Terriermon, pero sí alguien feliz por haber encontrado una familia con nosotros.